martes, enero 24, 2017

Reseña: El oráculo oculto (Las pruebas de Apolo) de Rick Riordan

Título: El oráculo oculto | Título orginal: The Hidden Oracle | Saga: The Trials of Apollo  
Autor: Rick Riordan |  Editorial: Montena |  Año edición: 2016


"Tras enfurecer a Zeus, el dios Apolo es desterrado del Olimpo. Débil y desorientado, aterriza en la ciudad de Nueva York convertido en un chico normal. Sin sus poderes divinos y bajo la apariencia de un adolescente que disimula sus cuatro mil años de edad, Apolo deberá aprender a sobrevivir en el mundo moderno mientras busca la manera de recuperar la confianza de Zeus. Pero entre dioses, monstruos y mortales, Apolo tiene muchos enemigos a quienes no les interesa que recupere sus poderes y vuelva al Olimpo. Cuando Apolo se ve en apuros, solo le queda un lugar donde acudir: un refugio secreto de semidioses modernos conocido como el Campamento Mestizo.”

¡Hola pequeños semidioses! Esta iba a ser una entrada obligatoria en mi blog y aunque ha tardado demasiado, ha sido porque he querido saborear cada palabra de este libro (eso y que he tenido que esperar hasta Reyes para poder tenerlo). Antes de empezar con esta reseña, antes de deciros qué me ha parecido el nuevo libro de Rick Riordan, creo que es importante que sepáis tres cosas fundamentales sobre mi persona:

1. Me fascina la mitología griega. Me gusta tanto que mi estantería 
se divide en: libros sobre dioses griegos y el resto.

2. Mi dios favorito es Apolo. Yo soy una hija de Apolo.
Me encanta el sol, la música, el tiro con arco y las profecías sangrientas.

3. Percy Jackson es para mí lo que Harry Potter al resto del mundo.

Ahora que conocéis mis tres rasgos más característicos, podréis entender MI EMOCIÓN. El momento en el me encontré con la noticia de que Rick Riordan iba a hacer una saga nueva dentro del universo de Percy Jackson y que esa saga iba a estar protagonizada por Apolo, simplemente morí.

Básicamente esto, pero multiplicado por 100.
Porque yo siempre había pensado que no era justo. Que Apolo no salía lo suficiente, que era un personaje ultra desaprovechado en los libros de Rick Riordan. Que merecía más páginas, más trama y más de todo en este universo. Si existen los dioses griegos (y espero que así sea porque si no he desaprovechado muchas horas de mi vida), alguno de ellos ha escuchado mis plegarias. Puede que os destripe el final de mi reseña pero tengo que decir que: lo he disfrutado como una niña en Disneyland. La emoción y mis ganas de vivir son bien reales.

Quiero hacer una advertencia. Si por alguna razón, totalmente lógica, te llama la atención este libro y piensas leerlo sin haberte leído antes la saga Percy Jackson y los dioses del Olimpo o Los Héroes del Olimpo…, ni lo intentes amigo. No pierdas el tiempo en ojear ni una sola página si no conoces los diez (sí, DIEZ!) libros anteriores. Aparecen personajes de ambas sagas y hay algunas tramas “abiertas” que tienen cierta importancia, así que es probable que al leerlo te encuentres más perdido que Chris Rodríguez en el laberinto. Sí, esta referencia era una prueba. Si la has entendido, puedes continuar. Si no, haz los deberes y empieza a leer El ladrón del rayo ahora mismo. Gracias por participar.

El libro comienza con la caída de Apolo al mundo mortal, sin poderes divinos y con sus dones… muy limitados. Todo esto debido a un castigo que le impone Zeus después de los acontecimientos que sucedieron en Los Héroes del Olimpo de los que quizá Apolo es un poco responsable, aunque él piensa negarlo completamente. Si no conocéis cómo funcionan los castigos de Apolo… suelen basarse
en que él es lanzado al mundo mortal para servir a un semidiós hasta que consiga redimirse por sus actos. Ahí entra en juego Meg McCaffrey, una semidiosa pequeña pero matona que tiene mucho que enseñarnos y que dará a Apolo muchos dolores de cabeza… literalmente.

Volvemos al narrador en primera persona, conociendo cada uno de los pensamientos de Apolo. ¡ALGO QUE ME ENCANTA! Echaba muchísimo de menos esta clase de narrador, y si Percy ya era bastante sarcástico… esperar a ver las barbaridades que suelta Apolo. Puedo asegurar con tranquilidad que uno de los puntos fuertes de este libro es el humor. Rick Riordan siempre escribe con mucho humor, pero creo que la saga de Los Héroes del Olimpo era un poco más madura(?). Había escenas divertidas, tengo señaladas miles pero creo que en esta nueva saga ha querido volver al humor de Percy Jackson y yo no puedo estar más contenta. Me he reído muchísimo con Apolo. Todo el rato era una sucesión de bromas acerca de las diferencias entre los seres inmortales y los mortales. A veces eran bromas un poco bestias, pero creo que estaréis de acuerdo conmigo en que esa es la magia de Apolo. Queriendo sacrificar la vida de semidioses sin ningún motivo aparente. Él es así. En realidad, todos los dioses son así. Lo que también me ha entusiasmado es que había muchísimas referencias a personajes y sucesos de otros libros de las sagas anteriores. Todo queda en familia.


Me fascina el planteamiento que le han dado, no sólo por ver a Apolo siendo mortal sino porque los oráculos van a tener un papel fundamental en el argumento de esta nueva saga. El autor indaga en los diferentes oráculos que existían en la mitología griega, nos da nueva información sobre ellos y también sobre las profecías. Lo que más me gusta me gusta de Rick Riordan es esto precisamente. Da igual que haya creado diez libros llenos de mitología con criaturas de todo tipo y seres totalmente desconocidos para aquellos que no estén muy puestos en el tema. Cuando piensas que ya te lo ha mostrado todo, Rick Riordan nos sorprende con mucha más mitología. Siempre hay algo nuevo y me emociona mucho (aunque sea difícil recordarlo todo).


Otro aspecto fundamental que me ha hecho amar este libro por encima de todas las cosas es que gran parte de la acción se lleva a cabo en el Campameto Mestizo. No podéis imaginaros lo mucho que necesitaba volver a este campamento. Los libros de Percy Jackson me tenían acostumbrada a dar vueltas por todo Estados Unidos, mientras que en Los Héroes del Olimpo se iban a Italia y Grecia. PERO AQUÍ NO, SEÑORES. Al Campamento Mestizo, toma ya. Tenéis que comprender la ilusión que me hizo ver que Apolo participaba en las actividades del campamento y sobre todo que…. ¡DORMÍA EN SU CABAÑA! Esa Cabaña 7 con la que yo siempre había soñado, en la que yo viviría si estuviera en el universo de Percy Jackson. Disfruté tanto leyendo cómo era la cabaña, con qué flores la decoraban, cómo estaba distribuida, quiénes dormían en esa cabaña (que ya lo sabía, pero ahora les hemos podido conocer mejor). Ver a Will, Kayla y Austin fue súper especial para mí. Que esa es otra, volver al Campamento Mestizo significa semidioses, y aunque Rick Riordan ha querido renovar un poco (y yo que me alegro), también se pueden ver a otros semidioses más conocidos como Nico (OMG, POR FAVOR… EHM, TE QUIERO), Connor Stoll (más cuqui) y también a Miranda Gardiner o a Nyssa. ¡En serio, ME ENCANTA!

La única pega que le puedo poner al libro en cuanto argumento es el villano/s que entran en juego en esta nueva saga. No me acaban de convencer. La verdad es que me ha decepcionado un poco, los villanos que introduce Rick Riordan suelen ser bastante míticos y con un halo de terror pero… no es la sensación que me ha dado esta vez. Es como si no se le hubiera ocurrido nada y simplemente hubiera elegido algo al azar. No quiero condenarlo del todo porque todavía falta mucho para el final de esta historia pero me quedo con la incógnita de cómo va a evolucionar este aspecto del libro.

No quiero hablar mucho del estilo de Rick Riordan porque si estáis interesados en el libro, me imagino que ya habréis leído los otros y que ya conoceréis más o menos cómo va la cosa. No ha cambiado mucho aquí. Son novelas con un ritmo un poco más lento, a Rick Riordan le gusta mucho cocinar bien sus tramas y aquí es más de lo mismo. Lenguaje muy simple, muy fácil de seguir pero muy rico en detalles.
Como siempre, podría hablaros de muchos personajes y me encantaría hacerlo porque necesito hablar seriamente sobre Will y Nico... pero voy a dejarlo para otro momento. Me voy a centrar en los dos personajes principales que entran "nuevos" (ya sé que Apolo no es nuevo pero en este libro es el protagonista).

No sé si habréis oído hablar alguna vez sobre el dios Apolo, pero es bastante singular. En el libro, Apolo se muestra muy pero que muy egocentrico, se siente como el centro del mundo, uno de los dioses más importantes. Y aunque ese egocentrismo pueda a veces sacarte de quicio, Rick Riordan lo ha llevado de una forma muy humorística. Nunca te puedes tomar en serio los comentarios de Apolo, aunque él sí lo haga. Como he dicho antes es sarcástico, muy inocente porque se cree casi todo lo que dice y con un fondo bastante complejo que hay que ir desentrañando poco a poco hasta conseguir ver la verdadera naturaleza del dios y merece mucho la pena. Apolo tendrá una experiencia auto-reflexiva que es muy interesante.

Meg McCaffrey es una nueva semidiosa que deberíais conocer. La he visto muy diferente a otros personajes femeninos de Rick Riordan. Había momentos en los que me recordaba un poco a Clarisse La Rue, lo que me gusta mucho, porque es muy cañera. Al igual que Apolo, es bastante inocente pero muy ruda y son pocas las cosas que la asustan. De momento queda mucho por ver de Meg pero estoy deseando que lleguen el resto de libros para verla más en acción y sobre todo para ver cómo sigue mangoneando a Apolo de forma tan espléndida. Sin duda creo que son un dúo muy peculiar que no desentona y que le da a esta libro un toque de frescura.

No hace falta ser un genio para ver lo mucho que me ha gustado este libro, pero es que era muy difícil que no hubiera sido así. Muy mal lo tendría que haber hecho Rick Riordan, y a día de hoy no me ha decepcionado. Espero que siga así. Lo que más me gusta de este autor y que también ha hecho en esta novela es enseñar mitología griega a jóvenes y a la vez tratar temas como la tolerancia el cuidado del medio ambiente y también la homosexualidad (o en este caso bisexualidad), que por supuesto tenía que estar representada en este libro. Apolo siempre ha sido bastante famoso por ser un dios que no se privaba a la hora de tener amantes de cualquier sexo. Uno de los romances más famosos del dios fue con Jacinto, un antiguo héroe griego. Me encanta que Rick Riordan haya tratado el tema de forma tan abierta y natural. Además, me quedo con una frase de Apolo que amé nada más leerla: 

«Deseaba coquetear con Chiara y robársela a Damien… 
o quizá robarle a Damien a Chiara, todavía no estaba seguro.»

Para finalizar, solo quería comentar que he estado haciendo un poco de research sobre esta nueva saga (que va a contar con cinco libros y si no es así, que alguien me avise) he visto que el segundo libro saldrá a la venta (solo en Estados Unidos, imagino) el 2 de mayo de este año y se titulará: The Dark Prophecy. Así que ya queda un poco menos para saber cómo va a continuar esta historia que, de momento, ha tenido un comienzo espectacular. A pesar de villanos que no entiendo, no puedo ponerle otra puntuación que no sea esta: 



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